¿Debe darle el chupón a su bebé? El uso del chupón presenta beneficios y también desventajas, según la Academia de Odontología General (AGD, por sus siglas en inglés).
Por el lado positivo, los chupones ofrecen una fuente de consuelo a los bebés. Los chupones también pueden ayudar a reducir la incidencia del Síndrome de muerte súbita del lactante, o SIDS (por sus siglas en inglés), de acuerdo con la AGD. Como los bebés que usan chupones duermen menos profundamente que aquellos que duermen sin chupones, pueden despertarse de un sueño profundo que podría resultar en el detenimiento de la respiración.
Por otro lado, los chupones pueden ser perjudiciales para el crecimiento y desarrollo de la boca y los dientes. El uso prolongado del chupón puede provocar cambios en la forma de la parte superior de la boca, impedir el crecimiento adecuado de la boca y crear problemas en la alineación de los dientes. Si elige darle el chupón a su hijo, estos consejos pueden reducir el daño:
Limitar el uso del chupón cuando el bebé necesite dormirse.
Buscar un chupón con orificios de ventilación en la cubierta, ya que permiten el paso de aire. Esto es importante si el chupón se aloja accidentalmente en la garganta del niño.
Siempre lave el chupón antes de dárselo al bebé.
Cómo cortar el hábito del chupón
La AGD recomienda que los niños deben dejar de usar el chupón a los dos años. (Hasta esa edad, cualquier problema de alineación con los dientes o el desarrollo del hueso por lo general se corrige dentro de los seis meses después de que dejó de usar el chupón).
Cortar el hábito no siempre es fácil. Aquí le damos algunas sugerencias para ayudar a quitarle la costumbre del chupón al bebé:
Sumerja el chupón en vinagre blanco.
Agujeree la parte superior del chupón o recórtela para reducir la satisfacción de la succión.
Déjelo en un viaje.
Siempre tire un chupón usado, no es higiénico guardarlo ni que otro niño lo use.